Miguel Alemany: Más allá de un gracias
.
Una vez realicé un test de fortalezas y resultó que la gratitud no estaba dentro de mis primeras. La buena noticia fue que, como toda fortaleza, podía entrenarla. Así que en casa comenzamos a utilizar el frasco de la gratitud: tomamos un frasco de vidrio, lo decoramos y lo colocamos visible y al alcance de todos. A un lado, pusimos papelitos y algunos lapiceros. Así que, durante la semana, si alguien hacía algo por mí, lo anotaba o si pasaba algo positivo, lo anotaba y depositaba en el frasco. Al final de cada semana designábamos un momento especial para abrirlo y compartir las experiencias por las que cada uno estaba agradecido y disfrutábamos de ese tiempo en familia. Esto me ayudó muchísimo a ser una persona más agradecida y consciente de las cosas buenas.
.
Cuando crece una de tus fortalezas, también lo hacen otras y sé por experiencia propia, que esta fortaleza es una en las que vale la pena invertir.
Cuando crece una de tus fortalezas, también lo hacen otras y sé por experiencia propia, que esta fortaleza es una en las que vale la pena invertir.
.
.
.
ACTIVIDAD PARA HOY
Escribe 1 motivo por el que estás agradecido y pónlo en algún frasco, cajita, bolsa (o compártelo en el grupo). Hazlo por los próximos 7 días y al completar la semana, elige un momento para volverlos a ver. Piensa en cómo te hace sentir y repítelo las veces que desees o adóptalo como parte de tu día a día.
